Anna Delvey, la estafadora que engañó al jet set de Nueva York
Anna Delvey, cuyo nombre real es Anna Sorokin, se convirtió en una figura notoria en la escena del jet set de Nueva York a principios de la década de 2010. Presentándose como una rica heredera alemana con una fortuna familiar considerable, Delvey construyó una red de contactos en la élite neoyorquina, frecuentando los lugares más exclusivos y llevando un estilo de vida ostentoso.
A lo largo de varios años, Delvey atrajo la atención de la alta sociedad de Nueva York con su comportamiento extravagante y su aparente generosidad. Organizaba fiestas lujosas, se hospedaba en hoteles de cinco estrellas y vestía con ropa de diseñadores de renombre, todo financiado por sus elaboradas estafas.
Sin embargo, en 2018, la fachada de riqueza de Delvey se desmoronó cuando fue arrestada y acusada de una serie de delitos financieros. Se descubrió que gran parte de su estilo de vida lujoso se financiaba a través de cheques sin fondos, tarjetas de crédito fraudulentas y préstamos que nunca pagó. Entre sus engaños se incluían intentos de obtener un préstamo de varios millones de dólares para abrir un club privado en Manhattan.
El caso de Delvey atrajo la atención de los medios de comunicación de todo el mundo, no solo por la audacia de sus estafas, sino también por su habilidad para infiltrarse en los círculos más exclusivos de la sociedad neoyorquina. Su historia inspiró artículos, podcasts y, eventualmente, una serie de televisión de Netflix titulada «Inventing Anna».
En 2019, Anna Sorokin fue declarada culpable de múltiples cargos, incluida la gran estafa y el robo de servicios. Fue condenada a varios años de prisión y se le ordenó pagar restitución a sus víctimas. Su caso sigue siendo un recordatorio de los peligros de la falsa apariencia y la facilidad con la que se puede engañar incluso a los más privilegiados.