El origen del emblemático logotipo de la NBA
En el año 1969, Alan Siegel recibió un encargo transcendental de Walter Kennedy, comisionado de la NBA en aquel entonces: diseñar un logo que fortaleciera la posición de la liga en la contienda por la supremacía del baloncesto profesional en Estados Unidos, en competencia con la floreciente ABA.
Sumergiéndose en un análisis meticuloso de diversas imágenes de jugadores y partidos, Siegel encontró inspiración en una fotografía de Jerry West, el legendario escolta de los Lakers. Esta imagen, capturada por Wen Robets y publicada en la revista Sport, le brindó la base para su creación: una silueta en azul y rojo, modelada por la figura distintiva de West.
No obstante, la NBA ha mantenido siempre la postura de no asociar exclusivamente el logo con West, optando por institucionalizarlo como un símbolo propio, evitando así vincular la identidad de la liga con un solo jugador.
En 1971, Siegel presentó el diseño final a la NBA, marcando un hito en la historia visual del deporte. El emblemático logotipo hizo su primera aparición en las camisetas de los árbitros ese mismo año, y en la cartelería televisiva durante la transmisión de las finales de la NBA 1971-1972 por la cadena ABC.
Desde entonces, este icónico emblema ha sido testigo de innumerables momentos memorables en la historia del baloncesto, consolidándose como un símbolo perdurable de la grandeza y la pasión que caracterizan a la NBA.