Las mascotas en los equipos y eventos deportivos, más que entretenimiento

Las mascotas han dejado de ser simples adornos en los equipos y eventos deportivos para convertirse en elementos esenciales de la identidad corporativa y la estrategia de marketing. Más allá de su papel como animadores, estas figuras representan los valores y la esencia de las marcas que representan.

Según Joan Costa, la imagen corporativa abarca la manifestación visual de una empresa o asociación, utilizando formas, colores y movimiento para representar una identidad coherente y tangible. Las mascotas son símbolos que encarnan estos valores de marca de una manera única y emocionalmente conectada con el público.

Las características de una mascota son diversas, desde transmitir sensaciones emocionales hasta compartir la imagen de la marca mediante colores corporativos y formas distintivas. Pueden tomar la forma de animales, personas u objetos, siempre y cuando estén en sintonía con la personalidad de la marca.

En el ámbito deportivo, las mascotas desempeñan un papel crucial al dar identidad a los equipos y eventos. Ejemplos notables incluyen las mascotas de la NBA, que se han convertido en parte integral de los espectáculos deportivos, y las icónicas mascotas de los mundiales de fútbol, que generan ingresos significativos a través de la venta de productos de merchandising.

A nivel local, aunque son menos comunes, equipos como el Atlético Junior y Atlético Nacional en Colombia han incorporado mascotas a su identidad, aunque a menudo se subutilizan. En eventos de renombre mundial, como los Juegos Olímpicos, las mascotas también desempeñan un papel importante al representar la cultura y la identidad del país anfitrión.

Además, las marcas comerciales han sabido integrar sus mascotas en el ámbito deportivo, adaptándolas sin perder su esencia. Ejemplos como el tigre Tony de Kellogg’s, que fomenta la actividad física entre los niños, demuestran cómo las mascotas pueden asociarse con deportistas reconocidos para promover valores compartidos.

En resumen, las mascotas no solo proporcionan entretenimiento, sino que también son herramientas efectivas en el marketing deportivo al generar aceptación en el público y transmitir los valores de la marca. Desde la infancia hasta la adultez, estas figuras conectan a los aficionados con los equipos y eventos de una manera única y memorable.