Walmart y los derechos humanos
Abril Gabriela López López
Sirva ese espacio para una denuncia pública. Me presento, soy una persona de esas que Arjona definió en su canción señora de cuatro décadas. Nací con una discapacidad motriz que me obliga a usar andador y en su caso, en centros comerciales, silla de ruedas. Por lo demás soy normal, cocino, hago las funciones de una ama de casa, realizo compras, pago bienes y servicios. En fin…
El miércoles próximo pasado, uno de mis ayudantes me llevó a Walmart sucursal Fuentes Mares, entre las Calles Francisco Villa y Nueva España. Hacía años que no visitaba ese centro comercial porque queda lejos de mi casa. En cuanto llegamos empezaron los problemas: no dejaron a mi acompañante me llevara hasta su coche una silla de ruedas. Debimos habernos retirado de inmediato, pero le dimos una oportunidad al local. Caminamos, con muchas dificultades, hasta la tienda y ahí usé el accesorio. No encontré lo que buscaba, eso es verdad, y decidimos retirarnos y regresar al vehículo, pero en la salida, un guardia dijo que no podíamos llevar más allá de la puerta del establecimiento la famosa y mencionada silla de ruedas en muy mal estado, por cierto. Mi acompañante le pidió esperar a que acercara el carro para que me pudiera subir. Pero él se negó, dijo que las políticas de la empresa habían cambiado ya que unos días antes les habían robado un artefacto similar. “Entonces usted nos puede acompañar a la banqueta” argumenté. “No, no me está permitido despegarme de la aquí”. Así, nos vimos obligados a caminar, con mucho esfuerzo, hasta el automóvil.
En un mundo donde en casi todas partes me tratan bien, me ayudan, colaboran, auxilian, el señalado Walmart, no hizo nada. Bien por ellos porque cuidan más un sillón que la seguridad de la clientela. Por supuesto no regresaré a esa tienda. Simplemente no puedo y no debo hacerlo.
Y me pregunto ¿dónde está el personal de la Comisión Estatal de Derechos Humanos? Seguramente muchas personas han sufrido tal discriminación y esa noticia no ha llegado a ellos. ¿en qué lugar de Walmart escondieron en un memorándum políticas que afectan a personas como yo? ¿dónde están las policías estatales y municipales para impedir estos abusos? Todas las instituciones mencionadas en alegres cifras de eficacias. Personas como quien firma necesitamos el auxilio, eso es indiscutible. No las exigimos, las merecemos. Por lo pronto que ese negocio ponga las sillas de ruedas donde su conciencia se los dicte.
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